Enfermedad renal ateroembólica

¿Qué es la enfermedad renal ateroembólica?

Esta enfermedad ocurre cuando partículas diminutas se dispersan a lo largo de los vasos sanguíneos pequeños en los riñones. Estas partículas están hechas de grasa solidificada y colesterol y otras sustancias.

Síntomas de enfermedad renal ateroembólica

Debe tenerse en cuenta que la enfermedad puede ser asintomática. Si hay síntomas, pueden desarrollarse repentinamente o empeorar lentamente durante semanas o meses. Estos síntomas pueden ser:

  • Ceguera
  • Fiebre, dolor muscular, dolores de cabeza, pérdida de peso
  • Dolor de costado
  • Problemas de pie
  • Alta presion sanguinea
  • Dolor abdominal, náuseas o vómitos

¿Cuáles son las causas de la enfermedad renal ateroembólica?

La enfermedad renal ateroembólica está muy relacionada con la aterosclerosis. La aterosclerosis, una enfermedad común a todas las arterias, se produce cuando la grasa, y otras sustancias se acumulan en las paredes de las arterias para formar una sustancia dura llamada placa.

En esta enfermedad, los cristales de colesterol se desprenden del revestimiento de la placa y se mueven hacia el flujo sanguíneo. Después de entrar en la circulación, los cristales se alojan en pequeños vasos sanguíneos (llamados arteriolas). Esto reduce el flujo de sangre a los tejidos y causa hinchazón y dolor en los tejidos, lo que puede dañar el riñón u otras partes del cuerpo.

¿Se puede prevenir?

Algunos factores pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad:

  • En usted tiene sobrepeso: perder peso.
  • Reducir o dejar de fumar.
  • Siga las recomendaciones médicas para controlar la diabetes y la hipertensión.
  • Reduce las grasas en la dieta, especialmente las grasas saturadas, para reducir el nivel de lípidos en la sangre.

¿Cual es el tratamiento?

No hay cura para la enfermedad renal ateroembólica. El tratamiento está dirigido a controlar las complicaciones del daño a los órganos.

Se pueden administrar medicamentos para combatir la hipertensión y disminuir los niveles de lípidos y colesterol.

Además, el médico puede recomendar otros cambios en el estilo de vida, como hacer más ejercicio o perder peso. Es vital dejar de fumar .

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Enfermedad renal ateroembólica

¿Qué es la enfermedad renal ateroembólica?

Esta enfermedad ocurre cuando partículas diminutas se dispersan a lo largo de los vasos sanguíneos pequeños en los riñones. Estas partículas están hechas de grasa solidificada y colesterol y otras sustancias.

Síntomas de enfermedad renal ateroembólica

Debe tenerse en cuenta que la enfermedad puede ser asintomática. Si hay síntomas, pueden desarrollarse repentinamente o empeorar lentamente durante semanas o meses. Estos síntomas pueden ser:

  • Ceguera
  • Fiebre, dolor muscular, dolores de cabeza, pérdida de peso
  • Dolor de costado
  • Problemas de pie
  • Alta presion sanguinea
  • Dolor abdominal, náuseas o vómitos

¿Cuáles son las causas de la enfermedad renal ateroembólica?

La enfermedad renal ateroembólica está muy relacionada con la aterosclerosis. La aterosclerosis, una enfermedad común a todas las arterias, se produce cuando la grasa, y otras sustancias se acumulan en las paredes de las arterias para formar una sustancia dura llamada placa.

En esta enfermedad, los cristales de colesterol se desprenden del revestimiento de la placa y se mueven hacia el flujo sanguíneo. Después de entrar en la circulación, los cristales se alojan en pequeños vasos sanguíneos (llamados arteriolas). Esto reduce el flujo de sangre a los tejidos y causa hinchazón y dolor en los tejidos, lo que puede dañar el riñón u otras partes del cuerpo.

¿Se puede prevenir?

Algunos factores pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad:

  • En usted tiene sobrepeso: perder peso.
  • Reducir o dejar de fumar.
  • Siga las recomendaciones médicas para controlar la diabetes y la hipertensión.
  • Reduce las grasas en la dieta, especialmente las grasas saturadas, para reducir el nivel de lípidos en la sangre.

¿Cual es el tratamiento?

No hay cura para la enfermedad renal ateroembólica. El tratamiento está dirigido a controlar las complicaciones del daño a los órganos.

Se pueden administrar medicamentos para combatir la hipertensión y disminuir los niveles de lípidos y colesterol.

Además, el médico puede recomendar otros cambios en el estilo de vida, como hacer más ejercicio o perder peso. Es vital dejar de fumar .

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