Los niños a veces pueden mostrar enojo, por ejemplo, cuando algo no sale a su manera, o si no sienten que algo es justo para ellos. La ira como esta es normal y es de esperar, y es una emoción que puede ser útil. Sin embargo, la ira infantil a veces puede ser problemática ya que es agresiva o está fuera de control. Los niños pueden enojarse más de lo normal por muchas razones, pero las más comunes incluyen ser acosados, ver a los miembros de la familia discutir, estrés, ansiedad o cambios hormonales que vienen con la pubertad. La ira del niño se puede tratar, ya sea en casa o con la ayuda de un especialista.