Prótesis de rodilla

¿Qué es la cirugía de reemplazo de rodilla?

La cirugía de reemplazo de rodilla es un procedimiento que consiste en extraer y reemplazar una articulación de rodilla dañada o desgastada con un implante artificial. Se coloca un implante en la estructura dañada y reemplaza su función, lo que le permite mover la articulación de nuevo, eliminando cualquier dolor que pueda haber tenido antes.

Durante la operación, se eliminan el hueso y el cartílago dañados. Para este propósito, se administrará un anestésico general o regional. El anestesista y el cirujano ortopédico decidirán cuál usar para minimizar la incomodidad tanto como sea posible.

¿Por qué se realiza la cirugía de reemplazo de rodilla?

El motivo principal de la cirugía de reemplazo de rodilla es la osteoartritis de la rodilla , que daña la articulación. También se puede requerir una prótesis o implante de rodilla en el caso de fracturas que hayan causado daño significativo al hueso subcondral, o en el caso de tumores óseos específicos.

¿Qué implica la cirugía de reemplazo de rodilla?

La cirugía de reemplazo de rodilla demora alrededor de dos horas e implica extraer el cartílago y el hueso dañados de la articulación y reemplazarlos con implantes artificiales. Estos implantes se pueden colocar en diferentes partes de la rodilla: el extremo inferior del fémur (pieza de metal), el extremo superior de la tibia (pieza de plástico resistente y metal), o en la parte posterior de la rótula (hecha de fuerte el plastico).

Una vez que se ha administrado la anestesia, el cirujano ortopédico hará una incisión de alrededor de 20 cm de largo en la articulación para abrirla. El procedimiento es el siguiente:

  • Se quita la rótula y se realiza un corte en el extremo del fémur y la tibia para acomodar la prótesis en el espacio articular
  • La parte inferior de la rótula también se corta para que la nueva pieza se ajuste bien
  • Las dos partes de la prótesis se fijan a los diferentes huesos, uno al fémur y el otro a la tibia, usando cemento o tornillos
  • Los tendones y los músculos de la articulación se reparan y la incisión se cierra.

Dependiendo de la lesión y la cantidad de hueso eliminado, el reemplazo de rodilla puede ser:

  • Total o tricompartimental: la articulación y la rótula están completamente reemplazadas. Esto se lleva a cabo con prótesis de eje rígido (rara vez se usan porque solo permiten un solo movimiento, flexión-extensión), prótesis de reemplazo de superficie articular (resección aislada de la articulación dañada), prótesis con componentes unidos (estos proporcionan buena estabilidad debido al vínculo entre la tibia y el fémur, así como los movimientos de flexión-extensión y rotación, pero ya no se usan) y prótesis autoportantes (estas reemplazan la superficie dañada y su diseño proporciona estabilidad y funcionalidad. El tipo más común es el medial prótesis de pivote).
  • Unicompartimental : utilizado para lesiones articulares limitadas. Las prótesis generalmente tienen un componente femoral de metal que se coloca en el cóndilo femoral dañado, y un componente de polietileno que se coloca en la parte tibial.

Preparación para un reemplazo de rodilla:

El cirujano ortopédico y el anestesista le aconsejarán sobre lo que debe hacer antes del procedimiento. Debe informarles sobre cualquier medicamento que esté tomando, para que no interfiera con el resultado de la cirugía. El especialista realizará una serie de pruebas preoperatorias, como un electrocardiograma, una resonancia magnética, radiografías y otros procedimientos que facilitarán la cirugía y les permitirán acceder a la articulación con pleno conocimiento de la lesión.

Cuidados postoperatorios:

Después de la cirugía de reemplazo de rodilla, debe seguir estrictamente los consejos del cirujano y el fisioterapeuta para una recuperación completa y exitosa. El fisioterapeuta diseñará una serie de ejercicios personalizados para usted, adaptados al tipo de lesión. Estos ejercicios aumentarán en intensidad a medida que aumente la movilidad de la articulación. El objetivo es recuperar y aumentar la fuerza muscular, corregir cualquier inestabilidad o deformidad, aliviar cualquier dolor que pueda tener, eliminar las adherencias de cicatrices y mejorar su función física.

El proceso de rehabilitación también incluye una serie de otras recomendaciones: para alternar movimientos de flexión y extensión al sentarse, use calzado cómodo y bien ajustado, evite cambios repentinos de peso para evitar sobrecargar la articulación, retire cualquier mueble que pueda hacer que tropiece o se caiga , hacer ejercicios en casa (según lo recomendado por el especialista), aplicar hielo en el área después de los ejercicios de rehabilitación, seguir las instrucciones del especialista para sentarse, caminar y bajar escaleras y, sobre todo, mantener la herida limpia y desinfectada.

Tratamientos alternativos:

No hay alternativa a la cirugía de reemplazo de rodilla. Solo se realiza en casos extremos, cuando la articulación está gravemente dañada y la lesión no se puede resolver con otros procedimientos o tratamientos. El especialista estudiará la lesión y decidirá cuál es el mejor tratamiento o alternativa.

10-01-2024
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Prótesis de rodilla

¿Qué es la cirugía de reemplazo de rodilla?

La cirugía de reemplazo de rodilla es un procedimiento que consiste en extraer y reemplazar una articulación de rodilla dañada o desgastada con un implante artificial. Se coloca un implante en la estructura dañada y reemplaza su función, lo que le permite mover la articulación de nuevo, eliminando cualquier dolor que pueda haber tenido antes.

Durante la operación, se eliminan el hueso y el cartílago dañados. Para este propósito, se administrará un anestésico general o regional. El anestesista y el cirujano ortopédico decidirán cuál usar para minimizar la incomodidad tanto como sea posible.

¿Por qué se realiza la cirugía de reemplazo de rodilla?

El motivo principal de la cirugía de reemplazo de rodilla es la osteoartritis de la rodilla , que daña la articulación. También se puede requerir una prótesis o implante de rodilla en el caso de fracturas que hayan causado daño significativo al hueso subcondral, o en el caso de tumores óseos específicos.

¿Qué implica la cirugía de reemplazo de rodilla?

La cirugía de reemplazo de rodilla demora alrededor de dos horas e implica extraer el cartílago y el hueso dañados de la articulación y reemplazarlos con implantes artificiales. Estos implantes se pueden colocar en diferentes partes de la rodilla: el extremo inferior del fémur (pieza de metal), el extremo superior de la tibia (pieza de plástico resistente y metal), o en la parte posterior de la rótula (hecha de fuerte el plastico).

Una vez que se ha administrado la anestesia, el cirujano ortopédico hará una incisión de alrededor de 20 cm de largo en la articulación para abrirla. El procedimiento es el siguiente:

  • Se quita la rótula y se realiza un corte en el extremo del fémur y la tibia para acomodar la prótesis en el espacio articular
  • La parte inferior de la rótula también se corta para que la nueva pieza se ajuste bien
  • Las dos partes de la prótesis se fijan a los diferentes huesos, uno al fémur y el otro a la tibia, usando cemento o tornillos
  • Los tendones y los músculos de la articulación se reparan y la incisión se cierra.

Dependiendo de la lesión y la cantidad de hueso eliminado, el reemplazo de rodilla puede ser:

  • Total o tricompartimental: la articulación y la rótula están completamente reemplazadas. Esto se lleva a cabo con prótesis de eje rígido (rara vez se usan porque solo permiten un solo movimiento, flexión-extensión), prótesis de reemplazo de superficie articular (resección aislada de la articulación dañada), prótesis con componentes unidos (estos proporcionan buena estabilidad debido al vínculo entre la tibia y el fémur, así como los movimientos de flexión-extensión y rotación, pero ya no se usan) y prótesis autoportantes (estas reemplazan la superficie dañada y su diseño proporciona estabilidad y funcionalidad. El tipo más común es el medial prótesis de pivote).
  • Unicompartimental : utilizado para lesiones articulares limitadas. Las prótesis generalmente tienen un componente femoral de metal que se coloca en el cóndilo femoral dañado, y un componente de polietileno que se coloca en la parte tibial.

Preparación para un reemplazo de rodilla:

El cirujano ortopédico y el anestesista le aconsejarán sobre lo que debe hacer antes del procedimiento. Debe informarles sobre cualquier medicamento que esté tomando, para que no interfiera con el resultado de la cirugía. El especialista realizará una serie de pruebas preoperatorias, como un electrocardiograma, una resonancia magnética, radiografías y otros procedimientos que facilitarán la cirugía y les permitirán acceder a la articulación con pleno conocimiento de la lesión.

Cuidados postoperatorios:

Después de la cirugía de reemplazo de rodilla, debe seguir estrictamente los consejos del cirujano y el fisioterapeuta para una recuperación completa y exitosa. El fisioterapeuta diseñará una serie de ejercicios personalizados para usted, adaptados al tipo de lesión. Estos ejercicios aumentarán en intensidad a medida que aumente la movilidad de la articulación. El objetivo es recuperar y aumentar la fuerza muscular, corregir cualquier inestabilidad o deformidad, aliviar cualquier dolor que pueda tener, eliminar las adherencias de cicatrices y mejorar su función física.

El proceso de rehabilitación también incluye una serie de otras recomendaciones: para alternar movimientos de flexión y extensión al sentarse, use calzado cómodo y bien ajustado, evite cambios repentinos de peso para evitar sobrecargar la articulación, retire cualquier mueble que pueda hacer que tropiece o se caiga , hacer ejercicios en casa (según lo recomendado por el especialista), aplicar hielo en el área después de los ejercicios de rehabilitación, seguir las instrucciones del especialista para sentarse, caminar y bajar escaleras y, sobre todo, mantener la herida limpia y desinfectada.

Tratamientos alternativos:

No hay alternativa a la cirugía de reemplazo de rodilla. Solo se realiza en casos extremos, cuando la articulación está gravemente dañada y la lesión no se puede resolver con otros procedimientos o tratamientos. El especialista estudiará la lesión y decidirá cuál es el mejor tratamiento o alternativa.

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