¿Qué es la ablación por fibrilación auricular?

La ablación por fibrilación auricular es un procedimiento utilizado para tratar la fibrilación auricular, un tipo de ritmo cardíaco anormal también conocido como arritmia. Funciona al dejar cicatrices en el interior del corazón, quemando o congelando partes del tejido, para ayudar a alterar o romper las señales eléctricas que causan latidos irregulares del corazón.

Hay un grupo de células en el corazón que inician la señal que inicia un latido cardíaco. En las personas que tienen fibrilación auricular, estas células son defectuosas y funcionan demasiado rápido haciendo que las cavidades superiores del corazón se fibrilen (tiemblen). Esto crea una desorganización de las contracciones en el corazón y significa que la sangre puede no ser bombeada eficientemente por todo el cuerpo.

¿Por qué se hace?

Algunas personas experimentan falta de aliento y palpitaciones. Además, la fibrilación auricular puede aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular.

Algunas personas toman medicamentos para controlar los síntomas, mientras que para otras la medicación es ineficaz, por lo que se necesita una ablación para controlarla.

Si su fibrilación auricular comenzó recientemente (hace menos de 7 días), es probable que una ablación le ayude a largo plazo. Si es muy persistente, es menos probable que la ablación funcione a largo plazo. Si usted no tiene ningún otro problema cardíaco, entonces este procedimiento podría ser una buena opción para usted.

¿Cómo se realiza el procedimiento?

El procedimiento se realiza normalmente en un hospital y se le administrará un sedante para ayudarlo a relajarse. Un médico insertará una aguja en la vena y colocará un tubo a través de la aguja. Después de esto, los catéteres se pasan a través del tubo y se guían a varios lugares dentro de su corazón. Estos catéteres tienen electrodos en las puntas que envían impulsos eléctricos al corazón. Se aplica calor o frío en el área deseada para destruir las células y causar cicatrices.

Todo el procedimiento puede durar hasta 6 horas. Se puede utilizar un medio de contraste para ayudar al médico a ver mejor los vasos sanguíneos. Algunas veces, esto puede causar incomodidad y dolor leve. El procedimiento debe suspenderse si el dolor es intenso o demasiado molesto.

¿Cómo te preparas para ello?

Su médico le ofrecerá consejos sobre cómo prepararse para ello. Por lo general, se le pide que deje de comer y beber la noche anterior al procedimiento.

Si usted tiene cualquier otra afección cardíaca o un dispositivo cardíaco implantado, como un marcapasos, su médico necesitará aconsejarle sobre cualquier precaución que deba tomar antes.

Cuidados posteriores

Después del procedimiento usted necesitará descansar unas horas y se monitorearán sus latidos cardíacos y su presión arterial. Es posible que pueda irse a casa el mismo día, pero es probable que necesite unos días de descanso antes de retomar sus actividades normales.

Después de recibir este tratamiento, sus síntomas deben desaparecer y usted comenzará a sentirse mejor. Sin embargo, sus latidos irregulares pueden regresar años después. Esto es más común en las personas de edad avanzada.

Es probable que vuelva a ver al médico después de tres meses para comprobar si los síntomas han reaparecido. Si lo han hecho, usted debe poder controlar los síntomas con medicamentos. Si usted necesita otro procedimiento, entonces se aconseja que espere hasta que haya sanado completamente antes de someterse a otro.

Su médico también podría sugerirle que se coloque un marcapasos si sus síntomas siguen reapareciendo.